martes, 26 de junio de 2007

Palabra de sombra

Le vi pasar. No a él, sino a su sombra. ¿Y no da lo mismo acaso? Estuvo ahí. De partió y sonrió, intentó amar quizás, tanto como una sombra puede hacerlo. Y yo, con toda parsimonia y sin reproches, le dije: "Te vi, estabas bien, eras feliz, pude sentirlo. Con tanta fuerza como se puede percibir a partir de la contemplación de una sombra". - "No pudo ser -respondió-. Yo viajé muy lejos, más allá del lugar donde creíste hallarme. Y a mi sombra no la dejé suelta. Conmigo la llevé, bien atada a mis plantas. Es imposible. Pero me alegra que otras efigies te hagan recordarme".
No dudé, ni de su palabra ni de mis sentidos. Cierto es que dadas las circunstancias no pude haberle visto, y cierto también es que le vi. ¿Y en quién he de confiar ahora? ¿En el ser que comprendo y palpo y cuya palabra jamás me ha desairado? ¿O en la imagen fantástica de una sombra errante que, pese a no engañar, mucho se opone al hombre vivo? Confío en los dos. Es a mí a quien temo.


* Nota: Como una forma de respeto al público, este blog no tiene risas grabadas y a partir de ahora intenta responder puntualmente a los comentarios que sus amables lectores tengan a bien dejar.

5 comentarios:

Lobo-X dijo...

Vaya manera de comenzar el día, una carga más a mi conciencia: ¿yo soy yo? =D

Anónimo dijo...

Plis, mi nombre es Carlos y estoy Buscando el Significado de "Itzel".

Itzel dijo...

Antonio: Ahora comprendes lo que he enfrentado...

Carlos: Me disculpo por no conocer el significado de mi nombre con precisión. Una pareja yucateca le dijo a mi madre que significa "estrella de la tarde" y lo mismo escuché alguna vez en el radio. Más no sé decirle.

Esponjita dijo...

Mi carísima Itzel: de ahí al esceptisismo no hay mucha distancia. Aunque claro: una escéptica como yo lo que le reconoce es la enorme fe (y la potencia de poderlo hacer) en distinguir entre el hombre fantástico y el real.
¿Uno puede distinguir entre la sombra del hombre que ama, y lo que ama en el amado? ¿no es lo amado pura ideación y pura fantasía?
Si dijera que sí, ¡oh terrible soledad!
Si dijera que no, entonces no tema, mi querida Itzel: la confusión no puede ser más poderosa que la fe... pregúntele al Doctor Angélico y a San Anselmo...

la esponja que ya está apunto de perder la fe en su propia tesis

PD: hace tres o cuatro días me pareció verla... no sé si sería o no una sombra suya, lo que sé es que no me atreví a hablarle... me ganó la pena, disculpe usted.

Itzel dijo...

Querida Esponjita: Maravillosa y muy atinada reflexión. Es la fe lo que nos permite sostener ese vínculo entre sombras, fantasías y realidades que finalmente constituye lo que amamos. No pierda la fe en su tesis y la próxima vez anímese a intercambiar saludos para que al fin tenga el gusto de conocerle. Ya se trate de mi sombra o de mí, ninguna de las dos muerde...